Marco Antonio Arslanian, orfebre de profesión, se inició en la artesanía de joyas y accesorios en el centro de Buenos Aires. Su vida cambió cuando ingresó a una logia masónica a los 24 años en 2005, y sus hermanos masones descubrieron su talento. En un tiempo en que obtener accesorios masónicos era un desafío, comenzó haciendo encargos simples, pero pronto exploró el vasto mundo de la joyería masónica.
Hoy, Marco y su equipo se enorgullecen de especializarse en joyería masónica excepcional, fusionando su compromiso con la masonería y la pasión por la orfebrería. Mantenemos viva nuestra hermandad con joyas únicas y significativas, siempre atentos a las necesidades y símbolos que son esenciales para nosotros.
Bienvenidos a nuestra historia, donde la masonería y la artesanía se unen en cada creación.